Cantan muros,
susurran paredes
las horas distantes
que regresan.
Una cálida humedad
transpira la piedra,
se arropa en vaho
la vigilia de los cuerpos.
Amor y ansia ganaron
la fuerza
derrotando el común
del tiempo entrometido,
tan cercana se hizo ya la
hora…
que el transcurrir de la vida,
toda.
Ígneo resplandor
de nuestros cuerpos,
que una sola piel,
único y mismo ser,
bajo su lluvia de hora cierta,
que el amor,
a flor de tiempo.
*Las horas cercanas. -JOff