Es inevitable .

Estremecidos desobedecen,

indulgentes se rebelan

bajo la suave tela,

senos tras la furia

que turgentes solicitan,

las manos aun trémulas.

Inquietos labios arden

bajo lenguas ansiosas.

Rayo febril, la mirada inquisidora.

Confiscados los cuerpos

mientras dura la tormenta,

penitencia.

El pecado?,

pecado sería no frotar piel contra piel

sin producir el perfume de la carne.

Somos conocedores de todas las lluvias,

seguiremos mojándonos bajo sus aguas,

será inevitable.

Desafiante el deseo nos roza

y nos cala con las últimas gotas.

Extasis el nombre del último trueno,

choque frontal corazón y sexo.

Nosotros…

siempre seremos libres de pecado…

Sicalipsis… .-JOff